En la horticultura protegida se
tiene la ventaja de un control mayor o menor de los parámetros climáticos en función de la tecnología
disponible. Por otro lado, para la nutrición de los cultivos no se avanzado
tanto en su control como en el caso de factores climáticos. Precisamente para
lograr una producción intensiva, el paso siguiente seria tener un control
eficiente de la nutrición y del riego de acuerdo a la fenología del cultivo; y
todavía, sería mejor contar con un sistema de inyección que permita controlar
el aporte de cada nutriente de forma individual para cada cultivo.
Debe mencionarse que actualmente
aún existe un conocimiento limitado en cuanto a la nutrición mineral día /
noche en el crecimiento de la planta, la relación entre el consumo de agua y la
nutrición mineral a corto y a largo plazo, etcétera. De hecho la mayor parte de
la información trata de los aspectos anteriores solamente a largo plazo
(semana, mes) y se basa en relaciones empíricas establecidas entre el consumo
de agua y el consumo de elementos minerales. Estas relaciones son más complejas
de lo que parecen y no es del todo cierto utilizarlas como una regla eficiente
para aplicarlo a la fertirrigación de los cultivos.
A continuación, lo que se aborda
son algunas consideraciones que se pueden plantear entre la interrelación de la
absorción nutrimental con la proporción de agua consumida por las raíces.
Diferentes estudios demuestran
que el nitrógeno está muy relacionado con el consumo de agua, y por lo tanto
con la intensidad luminosa y la temperatura. Otros estudios, también sugieren
que el manejo de la humedad del aire tiene una fuerte relación con la
fotosíntesis y la absorción de nitratos.
Por otro lado, también se ha encontrado que la absorción de nitratos es
significativa durante la noche. Desde luego es de suma importancia considerar
la curva de demanda de nitrógeno a lo largo de la fenología del cultivo, de la
cual la literatura nos indica que el consumo total de nitratos es mayor durante
la polinización, seguido de la maduración de frutos, desarrollo de frutos y por
último, la etapa vegetativa.
En relación al fosforo, muestra
una tendencia muy similar al nitrógeno.
El potasio también se absorbe en
mayor cantidad en las etapas de polinización y cuajado de frutos, siendo mínimo
en etapas vegetativas. La relación que guarda el potasio con el nitrógeno es
también de suma importancia, si la relación K:N es alta el crecimiento es más
lento, mientras que cuando el potasio es muy bajo se suelen tener problemas en
la calidad de los frutos, los cuales se pueden solucionar elevando el nivel de
potasio en la solución para fertirrigar. En cuanto a su absorción, el potasio
está estrechamente relacionado con la absorción de agua, así también con la
luminosidad y la temperatura, y para el potasio si influye de manera
significativa la temperatura del ambiente radicular. En este sentido, los altos niveles de humedad relativa reducen
la transpiración de las hojas, y si estas condiciones prevalecen por varios
días se presentara un amarillamiento de las hojas superiores de la planta,
cuyos síntomas se originan por una deficiencia de potasio y calcio en los
tejidos que se encuentran en desarrollo.
Bajo condiciones normales y en
términos prácticos es fácil observar una vinculación estrecha entre la
absorción nutrimental y el consumo de agua.
Sin embargo bajo otras
circunstancias como las situaciones de estrés, la absorción nutrimental se
muestra generalmente desvinculada al consumo de agua, dejando una idea de que
ambos factores no están influenciados con la misma magnitud por las condiciones
del ambiente.
Autor
Fertilab
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